EL NIÑO EN LA CIMA DE LA MONTAÑA - JOHN BOYNE



Título original: The boy at the top of the mountain
Autor: John Boyne
Género: Ficción histórica
Editorial: Salamandra
Páginas: 256

De padre alemán y madre francesa, Pierrot ha tenido una infancia no muy distinta de la de cualquier niño de su época. Sin embargo, nos hallamos en París, corre el año 1935 y la guerra que se avecina trastocará el destino de millones de personas. Tras la muerte prematura de sus padres, Pierrot deberá separarse de su íntimo amigo Anshel y abandonar Francia para vivir con su tía Beatrix, que trabaja de ama de llaves en una mansión imponente erigida en lo alto de una montaña. Pero no es una casa cualquiera; se trata nada menos que del Berghof, la enorme residencia que Adolf Hitler posee en los Alpes de Baviera.

Sí, a sus siete años, alojado de manera involuntaria en el entorno íntimo del todopoderoso Führer, Pierrot se verá inmerso en un mundo tan extrañamente seductor como peligroso. En él no hay lugar para la inocencia, y cuando al final de la guerra es capturado por los aliados, Pieter —como ahora se llama— llevará un peso insoportable en su conciencia. A su regreso a París, abrumado por la culpa, un aspecto clave de la historia surgirá como una tabla de salvación, y el inesperado desenlace será una muestra más de la insondable dimensión del perdón y la amistad.
¡Hola lectores! Por fin len traigo esta reseña, no me acordaba que se las debía, si no mal recuerdo, este libro lo leí en septiembre del año pasado.

Este libro, al igual que El niño con el pijama de rayas, se desarrolla durante la segunda guerra mundial.
El libro transcurre desde 1936 hasta un poquito más de 1945, Pierrot pierde a su padre causa de los traumas que le han dejado la guerra y su madre a causa de una terrible enfermedad.

Pierrot se ha quedado solo, pasa unos días con su amigo Anshel pero no se puede quedar con ellos para siempre, de modo que tendrá que irse a un orfanato, pero su tía Beatrix ha decidido hacerse cargo de el y lo lleva a vivir al Berghof, el lugar donde trabaja, Hitler, el patrón, estaba renuente a que el niño viviera ahí, pero finalmente aceptó.

Para proteger a su sobrino, Beatrix le menciona a Pierrot que su nombre tendrá que ser modificado, ahorá se llamará Pieter. La vida del pequeño cambia lo suficiente en el Berghof pero no para bien, el pequeño es influenciado por el führer, no entiende lo que pasa pero se siento orgulloso de pertenecer a los nazis.

Pierrot ha sufrido muchos desprecios a su corta vida, que se siente seguro y valiente con la protección de Hitler, por lo que comienza a olvidar su pasado para darle cabida al orgullo nazi.

El libro nos muestra un poquito de la horrorosa vida que pasaron todos los que padecieron la guerra, aunque Hitler en algunas escenas parece una persona un poco amable y buena y claro, si aparecen sus despiadados actos.

El libro me ha gustado un poco, lo leí muy rápido, es una lectura muy ligera y fluida, me hizo falta un poquito más aunque hubo muchas sorpresas y traiciones. Debo admitir que no me gusta leer sobre esta época, no sé si vuelva a leer un libro que aborde estos temas.

No he leído todos los libros de Boyne y no sé si todos hablen sobre la guerra y estén conectados unos con otros, pero en este encontré una ligera conexión con El niño con el pijama de rayas.
"...le hizo comprender que era posible que el tiempo siguiera su curso, pero que las ideas de algunas personas se quedarían enquistadas para siempre"

Calificación:

Nos vemos en la siguiente entrada lectores, no olviden poner su zapato y su carta bajo el árbol, gracias por leer la reseña.

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